Las vitaminas son compuestos orgánicos que forman parte de uno de los grupos más importantes, ayudan a regular nuestro organismo, no solo a nivel inmunológico, formando defensas, sino también ayudan en los procesos de transporte y asimilación de nutrientes, son indispensables en reacciones químicas celulares.
Las vitaminas se denominan micronutrientes esenciales porque son necesarias para el organismo, pero solo en pequeñas cantidades y no son intercambiables (es decir, la función de una vitamina no se puede suplir administrando otra). Las vitaminas no aportan energía a la dieta. Son 13 clases de sustancias, cuatro de ellas solubles en grasa o liposolubles. Las vitaminas no trabajan solas, cada uno se complementan, ayudan a su absorción entre sí, como también van en conjunto con los minerales.
Las frutas y verduras se consideran como fuentes importantes de vitaminas. Por ejemplo, la naranja y las frutas cítricas, el kiwi, la guayaba y el jitomate son fuente de vitamina C, en tanto que la zanahoria aporta carotenos (precursores de vitamina A) y las verduras de hoja verde, como la espinaca, aportan ácido fólico. Otros alimentos como la leche son fuente de vitamina D y las carnes, de vitaminas del complejo B, como la niacina.
¿Todos necesitamos tomar suplementos vitamínicos?
La respuesta es no, las vitaminas son parte vital de una dieta saludable. Se ha determinado para casi todas ellas la cantidad diaria recomendada, es decir, la cantidad que la mayoría de las personas sanas necesitan tomar cada día para mantenerse saludables.
Siempre los pacientes creen que el envejecer va de la mano con tomar suplementos, vitaminas, para estar fuertes, lo que es más demandada durante el cambio de clima de verano a invierno. Pero realmente no es así, puesto que un paciente puede llegar perfectamente a su requerimiento de vitaminas y minerales a través de la alimentación.
Ahora, si es verdad que hay ciertas enfermedades, situaciones clínicas o fármacos que conllevan a que una vitamina en particular no se esté absorbiendo de la manera correcta o se le bajen al paciente las defensas y que por eso necesiten suplementación. Para poder saber cuales son esas vitaminas que están deficientes se debe realizar una consulta nutricional.
Uno de los fármacos que evitan la absorción de las vitaminas son los antiácidos. Muchas personas consumen bicarbonato, lo cual afecta el ph y los jugos gástricos, lo cual repercute a la hora de absorber ciertas vitaminas, minerales y también las proteínas.
Otro ejemplo que podemos dar es el uso de Metformina, este es un medicamento que se utiliza en pacientes con Diabetes, el cual a largo plazo, y el algunos pacientes a corto plazo, les puede causar déficit de vitamina B12.
¿Me podría producir daño el consumo excesivo de vitaminas?
Consumir grandes cantidades (megadosis) de ciertas vitaminas (normalmente como suplementos) sin supervisión médica puede tener efectos nocivos, por ejemplo, el exceso de vitamina C que nuestro cuerpo no absorbe, puede ocasionar un mayor riesgo de producir cálculos renales. Nuestro cuerpo tiene un requerimiento exacto de cada vitamina, después que alcanzar el mismo este es desechado por nuestro organismo, pero durante ese proceso el exceso puede causar daño hepático y renal.
¿Cuándo no se recomienda tomar suplementos vitamínicos?
Se suele eliminar la suplementación cuando después de la evaluación nutricional, el paciente con la alimentación que lleva está alcanzando el requerimiento de las vitaminas y minerales que su cuerpo necesita. También cuando un paciente llega a consulta con enfermedad renal crónica, hay que trabajar en conjunto con el nefrólogo para poder enviar una suplementación adecuada a su condición, por el trabajo que esto puede llevar al riñón. En estos casos se elimina la suplementación y se sustituye mejorando la alimentación del paciente, o se envían dosis pequeñas.
Mito o realidad ¿La falta de energía tiene que ver con las vitaminas?
Mito, las vitaminas no dan energía, si ayudan dentro de ciclos metabólicos como es el ciclo de Krebs, pero la principal fuente de energía no son las vitaminas, son los macronutrientes como carbohidratos y grasas. Al llegar un paciente a consulta, indicando que esta falto de energía, lo que se debe evaluar son otros puntos como trastorno de sueño, exceso de ansiedad y estrés o que el paciente tiene horarios desordenados de comidas, lo que hace que no este cubriendo sus necesidades energéticas es los momentos donde hay mayor desgaste.
¿Los multivitamínicos funcionan?
Los multivitamínicos no son usualmente recetados, son pocos los casos, puesto que es muy raro que un paciente tenga falta de muchas vitaminas al tiempo. En la mayoría de los caso a los que se les mandan multivitamínicos son a pacientes con anorexia, depresión, en caso de embarazos.
Ahora, una pregunta que siempre se hace es ¿estos multivitamínicos se absorben en su totalidad? la respuesta es que no hay estudios que lo corroboren, pero los multivitamínicos que contienen dosis de vitaminas y minerales similares a la ingesta diaria recomendada son probablemente inocuas para la mayoría de las personas. Sin embargo los suplementos, como las megavitaminas, que contienen cantidades mayores que las recomendadas, pueden tener efectos no deseados e incluso pueden ser perjudiciales. Por eso solo son recetadas en casos muy puntuales.
¿Cuáles son las principales vitaminas para los adultos mayores?
Las 3 vitaminas que en general necesitan los adultos mayores, por su deficiencia en este grupo etario son:
Vitamina D
Vitamina A
Vitamina B12
Es importante acotar que la información presentada no debe utilizarse como sustituto de la atención médica de un especialista.
Si quieres mas sobre Vitaminas en el adulto mayor, te invitamos a ver nuestra charla con el Dr. Ian Falvy y su invitada, la Dra. Ximena Chavez, Nutricionista.
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